Incorporan vehículos con nuevas tecnologías para reducir accidentes en el Valle
Incorporan vehículos con nuevas tecnologías para reducir accidentes en el Valle
11-09-2025 |
En 2025, sistemas como frenos ABS, alerta de fatiga y cámaras 360 impulsan la seguridad vial en el suroccidente colombiano.
La seguridad vial sigue siendo una de las principales preocupaciones en Colombia. En 2024, según cifras de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, más de 7.200 personas perdieron la vida en accidentes de tránsito. Con el inicio de 2025, el panorama en el suroccidente colombiano muestra un cambio positivo: la introducción de nuevas tecnologías de asistencia a la conducción en los vehículos vendidos en la región promete reducir significativamente los índices de siniestralidad.
Creciente incorporación de sistemas de seguridad en vehículos nuevos
En el Valle del Cauca, donde el parque automotor ha aumentado con fuerza en ciudades como Cali y Palmira, las marcas han comenzado a ofrecer modelos con equipamiento de seguridad que antes solo se veía en vehículos de gama alta. Según Fenalco Valle y la Asociación Colombiana de Vehículos Automotores, más del 40 % de los automóviles matriculados en la región en lo corrido de 2025 incluyen frenos ABS, control electrónico de estabilidad y sistemas de alerta de colisión.
Asistencias que ya se encuentran disponibles en el mercado colombiano:
Alerta de fatiga del conductor, que monitorea el tiempo de manejo y recomienda pausas.
Cámaras 360 grados, que facilitan maniobras en calles estrechas o parqueaderos reducidos, comunes en zonas urbanas de Cali.
Frenado autónomo de emergencia, disponible en algunos modelos SUV de gama media.
Sensores de punto ciego, especialmente útiles en autopistas del Valle, donde motocicletas y vehículos de carga comparten los mismos corredores.
Impacto en la seguridad vial del suroccidente colombiano
Las carreteras que conectan Cali con municipios como Jamundí, Yumbo y Buga presentan alta densidad vehicular y riesgo elevado de siniestros, especialmente en horas pico. De acuerdo con la Secretaría de Movilidad de Cali, en 2024 los choques por distracción o exceso de velocidad fueron responsables del 32 % de los accidentes en la ciudad. En este sentido, los sistemas de asistencia están pensados para reducir la influencia del error humano, que según la Agencia Nacional de Seguridad Vial es el origen del 90 % de los incidentes.
La percepción de los conductores locales
Un estudio realizado por el Observatorio de Movilidad Sostenible de la Universidad del Valle indica que el 65 % de los caleños encuestados consideran que invertir en un vehículo con equipamiento de seguridad avanzada es “una prioridad para proteger a la familia”. Sin embargo, también advierten que el precio sigue siendo una barrera: los modelos con sistemas de seguridad completos pueden costar entre un 12 % y un 20 % más que las versiones básicas.
Iniciativas públicas y privadas para fortalecer la seguridad
El Ministerio de Transporte anunció que a partir de 2026 será obligatorio que todos los vehículos nuevos vendidos en Colombia cuenten con frenos ABS y dos airbags como mínimo. Este anuncio, realizado en rueda de prensa en Bogotá, refuerza el compromiso del Estado con la seguridad vial. Por su parte, concesionarios en Cali como Automotora del Pacífico han comenzado a ofrecer planes de financiamiento flexibles para facilitar el acceso a modelos equipados con estas tecnologías.
Educación vial y tecnología: una alianza necesaria
Expertos del Centro de Estudios de Movilidad de la Pontificia Universidad Javeriana Cali insisten en que la tecnología por sí sola no basta: debe ir acompañada de educación vial constante. De poco sirve contar con alerta de fatiga o frenado autónomo si los conductores no reciben formación sobre su uso correcto o si persisten prácticas riesgosas como el uso del móvil al volante.
Retos para el futuro inmediato
Aunque el suroccidente colombiano avanza en la adopción de sistemas de seguridad vehicular, aún existen retos importantes:
Accesibilidad económica, ya que no todos los hogares pueden costear vehículos con tecnología avanzada.
Mantenimiento especializado, pues los sensores y sistemas electrónicos requieren talleres certificados, aún escasos en municipios intermedios.
Compatibilidad con infraestructura vial, dado que muchos sistemas funcionan mejor en vías señalizadas y en buen estado, condición que todavía no se cumple en carreteras secundarias del Valle y Cauca.
El 2025 marca un punto de inflexión en la movilidad del suroccidente colombiano. La llegada de tecnologías de asistencia a la conducción representa una oportunidad real para reducir accidentes y salvar vidas en carreteras urbanas y rurales. No obstante, para que este avance tenga un impacto sostenido, será fundamental acompañarlo de educación vial, fortalecimiento de la infraestructura y políticas públicas que aseguren la democratización de la seguridad vehicular. Tu opinión