Factores que suman seguridad
La principal responsabilidad de un conductor al sentarse frente al volante de un vehículo es la de garantizar la seguridad de sus pasajeros, así como la de los peatones y ocupantes de otros vehículos.
Es por eso que los automovilistas deben cumplir las leyes de tránsito y de cortesía, mantenerse concentrados en la conducción, hacer buen uso del coche y controlar las leyes físicas que afectan a cualquier cuerpo en movimiento, entre otros deberes.
No obstante, existen factores de seguridad, que resultan inéditos para la mayoría. Entre ellos:
- Debido a la fricción generada con el asfalto en los viajes por carretera, las llantas se recalientan y multiplican la presión interior. Así, el conductor y sus acompañantes quedan expuestos a sufrir las graves consecuencias que conlleva el estallido de una llanta por exceso de presión.
- Marchando a 100 km/h el conductor de un auto dispone de menos de dos segundos para reaccionar y evitar un peatón u obstáculo detectado a 50 metros de distancia.
- Las plazas traseras de un vehículo son las más seguras si los ocupantes usan el cinturón de seguridad y las más inseguras y mortales, si no lo llevan puesto.
- Para entender mejor lo anterior y darse una idea de cómo actúan las leyes físicas basta con mencionar que en una colisión frontal a 60 kilómetros por hora, un pasajero de 70 kilos de peso sentado en el asiento posterior sin usar el cinturón saldrá violentamente despedido hacia el espaldar del asiento delantero con una fuerza cercana a las dos toneladas de peso. Este desmesurado peso resulta mortal tanto para el pasajero de atrás, como para el de adelante, que recibe el impacto.
- Los elementos con gas a presión (atomizadores, encendedores, gaseosas, etc.) dejados en vehículos estacionados a pleno sol pueden estallar y causar daños en su interior.