Cinco consejos para mantener la buena postura frente al volante
Adoptar una posición ideal frente al volante es la primera regla de seguridad que deben cumplir todos los conductores de vehículos.
Además de evitar accidentes y de facilitar la conducción en grado sumo esta medida de sentarse bien para conducir trae consigo una serie de importantes beneficios como son el menor esfuerzo físico al conducir que se traduce en menos estrés y cansancio, poder evitar obstáculos con facilidad y guiar el auto con eficiencia y precisión, entre otras ventajas.
Aquí, cinco consejos para mantener una buena postura frente al volante.
1. Siéntese frente al volante de manera relajada con la espalda pegada al espaldar del asiento.
2. Estire los brazos de forma natural y colóquelos en la parte superior del volante.
3. Mueva el asiento hasta encontrar el punto en donde las muñecas quedan apoyadas sobre la parte superior del volante manteniendo el cuerpo en la posición indicada en el primer numeral.
4. Hallado ese punto se deben mover las manos hasta la posición de las 10:10 de ese ‘reloj’ llamado volante. De esta manera, los brazos quedarán levemente flexionados para permitir el fácil accionar del volante y funcionar como ‘amortiguadores’ en caso de una colisión.
5. Una vez sentado en la posición ideal y con las manos en el lugar indicado, el conductor podrá darse cuenta que las piernas quedan natural y ligeramente dobladas dejando las rodillas por encima del nivel de la cintura para garantizar el adecuado flujo sanguíneo de las extremidades y el fácil movimiento de los pies.
A propósito de lo anterior, vale anotar que esta correcta postura de las piernas permite la fácil operación de los pedales usando unos pocos músculos del pie y no decenas de músculos de la cadera, muslos, pantorrillas y pies como ocurre con los conductores que manejan ‘pegados’ al volante.